Chile apuesta por potenciar una industria de ingredientes funcionales y aditivos especializados
Como un instrumento que sentará las bases para una nueva industria chilena de ingredientes funcionales y aditivos especializados, define el Ministerio de Agricultura a los “Polos Territoriales de Desarrollo Estratégico”, una iniciativa creada por el Minagri a través de la Fundación para la Innovación Agraria, FIA, con financiamiento del Fondo de Inversión Estratégica, FIE, del Ministerio de Economía.
La iniciativa fue lanzada oficialmente el pasado 9 de noviembre en el Maule, una de las ocho regiones que se verán impactadas por la acción de los polos territoriales. En la planta Tucapel de Retiro, y en presencia de agricultores, investigadores, académicos y representantes de las empresas participantes, el ministro de Agricultura Carlos Furche, relevó el trabajo realizado por FIA para el diseño e implementación de este instrumento. “A través de un extraordinario esfuerzo público-privado, se ha generado un modelo de encadenamiento inédito, que permitirá aprovechar el gran potencial que posee Chile en la provisión de materias primas de origen agrario, agroalimentario y forestal”, destacó.
La convocatoria realizada por FIA, dio origen a 5 polos territoriales, abarcando 8 regiones del país, desde Valparaíso a Los Lagos, y se espera que su funcionamiento impacte a cerca de 10 mil agricultores, en su mayoría provenientes de la agricultura familiar campesina. Los polos son:
Polo Granos Ancestrales, gestionado por Orafti, abarcando un territorio que va desde la región Metropolitana a la región de La Araucanía. Su producción se basará en quínoa y alforfón, dando origen a un portafolio de productos que incluye harinas, concentrados y mezclas funcionales.
Polo Cultivos de O’Higgins y El Maule, gestionado por el Centro de Estudios en Alimentos Procesados. Su producción se basará en quínoa, maqui, olivo y tomate, dando origen a un portafolio de productos que incluye saponina, antioxidantes, licopeno e hidroxitirosol.
Polo Legumbres, gestionado por la Pontificia Universidad Católica, abarcando desde la región de Valparaíso a la región del Biobío. Diversas leguminosas darán origen a un portafolio de productos que incluye fibras, proteínas, almidones y germinados.
Polo Pigmentos Naturales y Antioxidantes, gestionado por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), abarcando desde la región de Valparaíso a la región de Los Lagos. Su producción se basará en papas moradas, zanahoria morada, camote y calafate, dando origen a un portafolio de productos que incluye colorantes y antioxidantes.
Polo Pecuario, gestionado por Ecoterra, abarcando un territorio que va desde la región Metropolitana a la región del Maule. Su producción se basará en leche de cabra y huevo, dando origen a un portafolio de productos que incluye péptidos y caseínas, entre otros.
María José Etchegaray, directora ejecutiva de FIA, explica que “Cada polo será un espacio de articulación entre empresas, entidades tecnológicas, agricultores, asociaciones y organizaciones productivas, con la capacidad de sumar a actores internacionales a través de alianzas estratégicas”
El Fondo de Inversión Estratégica del Ministerio de Economía (FIE), fue la entidad que aportó los recursos para la concreción de esta iniciativa. En opinión de su secretario ejecutivo, Thierry de Saint Pierre, “las extraordinarias condiciones naturales que posee Chile le han permitido desarrollarse y competir con ventaja frente a los demás países de la región. Como FIE y Ministerio de Economía, no tenemos duda que los Polos Territoriales continuarán esta senda”.
MIRADA ESTRATÉGICA
Este ambicioso plan comenzó a gestarse hace dos años, cuando FIA, a través de la Subsecretaría de Agricultura, decidió presentar el instrumento al Fondo de Inversión Estratégica del Ministerio de Economía (FIE), postulación que se enmarcó en el Programa Transforma Alimentos de Corfo, del cual la fundación es miembro activo.
La agencia del Minagri llevaba 5 años ejecutando el Programa de Innovación en Alimentos Más Saludables (PIA+S) y en el marco de este trabajo había identificado con nitidez la oportunidad de Chile de desarrollar una industria de ingredientes funcionales y aditivos especializados.
“Por la riqueza y variedad de sus climas, de suelo y de materia prima, nos resultaba evidente que Chile era uno de los países con potencial para producirlos y sentíamos que la alta demanda por estos productos constituía una oportunidad única que el país no podía dejar pasar. Por eso, decidimos dar un paso más y diseñar un instrumento capaz de articular y generar sinergias entre los diversos actores vinculados a este tema de manera de aprovechar esta oportunidad, agregando valor a nuestro sector”, relata María José Etchegaray.
En enero de este año FIA abrió la convocatoria que asignará recursos por un total de 3600 millones de pesos en un lapso de tres años. Cada polo deberá constituirse a partir de un portafolio que identifique las distintas materias primas agrarias que puedan ser producidas y transformadas en un sector determinado del país.
Fuente: FIA