Luz LED pordía destruir los nutriente de la leche

Miércoles 22 de Junio de 2016

La Luz LED en las vitrinas y tiendas de comestible cada vez  son más comunes, y eso es una mala noticia para los consumidores de leche. Investigadores de Cornell en el Departamento de Ciencia de los Alimentos encontraron que la exposición a la luz (LED) emite fuentes de diodos y aunque sea por unas horas degrada la calidad percibida de leche más que el contenido microbiano que se acumula naturalmente con el tiempo.

El estudio determinó que la leche se mantuvo en mayor calidad durante dos semanas porque estuvo protegida de la exposición LED.

Los vendedores adoptan estas fuentes de energía de luz eficiente en ubicaciones de punto de venta, y los comerciantes sin saberlo podrían estar saboteando el producto. Robin Dando, profesor asistente en el Departamento de Ciencia de los Alimentos dijo: "Es atractivo a la vista, pero en realidad podrían estar dañado la calidad del producto"

Es bien sabido que la calidad de la leche se ve afectada negativamente por la exposición a la fuente de luz artificial y sobre todo en lo respecta a lo nutricional. La Riboflavina y otros componentes fotosensibles en la leche se activan cuando es golpeado por la energía luminosa, liberando una cascada de electrones que pueden degradar las proteínas y las grasas.

El sabor resultante se describe comúnmente como la de cartón o plástico. Todos los actuales envases de leche permiten una cierta exposición a la luz; incluso las jarras de plástico opacas tienen potencial de comprometer las leches de más alta calidad o desarrollar malos sabores.

Para el estudio, los consumidores puntuaron a la leche descremada que fueron expuestas a la luz y otra parte de la leche que se mantuvo protegida de toda la luz durante 14 días, mientras que un lote fue expuesto durante un día a la iluminación del mundo real que se encuentra en las tiendas durante cuatro horas.

"Los consumidores de leche quieren la leche más fresca, la leche más alta en calidad que puedan conseguir," dijo Nicole Martin, autor principal del estudio y el supervisor del Programa de Mejora en la Calidad de la leche de Cornell. "Para la mayoría de los consumidores la idea de frescura está en relación inversa a la fecha de caducidad en el envase. Este estudio muestra que la exposición a la luz es un factor mucho mayor que explica el deterioro de la calidad de la leche sin importar la fecha en el que vende".

La iluminación LED produce un patrón de longitud de onda que difiere de las lámparas fluorescentes utilizadas para iluminar vitrinas. El LED emite en el espectro azul, alrededor de 460 nanómetros, y produce un pico de emisión más amplia que las lámparas fluorescentes. Ese pico a la luz LED está cerca de la banda estrecha, donde la Riboflovina absorbe la luz, un hecho que los investigadores creen que podría ser la destrucción selectiva de los nutrientes y dañar la calidad percibida de la leche.

"Hemos encontrado que la leche pasteurizada sin exposición a la luz LED se mantuvo en alta calidad durante 14 días; este importante estudio proporciona ahora la nueva información que se puede utilizar para mejorar aún más la calidad de la leche, por ejemplo a través del envase y la protección de la luz", dijo el co-autor Martin Wiedmann, el profesor Gellert Familia en Seguridad Alimentaria.

Las luces LEDs se están volviendo más comunes en las tiendas para impulsar la eficiencia energética. Los investigadores sugieren que los fabricantes podrían recurrir a un mejor empaque de bloqueo de luz para reducir el efecto dañino de todos los tipos de luz.

 Fuente: www.foodnewslatam.com