En mayo de este año fue inaugurado formalmente el laboratorio que realiza los análisis de gluten en los alimentos, en la zona de avenida Ramírez y López y Planes (sede de Vialidad Provincial), en la capital provincial.

Luego de la resolución de algunos aspectos jurídicos, que permitieron la percepción de aranceles por la tarea, funciona a pleno desde octubre satisfaciendo la demanda de empresarios y productores que necesitan del análisis para poder pedir luego la certificación de “alimento libre de gluten” que permita la comercialización de los alimentos. El laboratorio, dependiente del Instituto de Control de Alimentación y Bromatología (ICAB), también trabaja en coordinación con las organizaciones de la sociedad civil vinculadas a la problemática de la venta y consumo de estos productos como son la Asociación de Celiacos de Entre Ríos y la asociación Asistencia al Celiaco de la Argentina(Acela).

Karina Meier, bioquímica del laboratorio, explicó que “hoy se está funcionando, básicamente, a pedido de los productores que necesitan que se analicen los alimentos”. “Hay arroceras, por ejemplo, que acuden al laboratorio”, puso como ejemplo y explicó que estas empresas deben luego seguir un protocolo para lograr finalmente el certificado que favorezca la comercialización.

“Como organismos de control que somos, trabajamos con las asociaciones de la población celíaca en el marco de un programa del que el laboratorio es parte”, expuso.

Hoy por hoy, el laboratorio funciona exclusivamente para los alimentos libres de gluten, aislado, para evitar la contaminación. Esa misma infraestructura podría permitir, con mínimos retoques, la detección de alérgenos como las proteínas del huevo o de la leche que pueden estar presentes en los alimentos, en los granos de maíz, de soja.

“No sería muy distinto a lo que tenemos hoy. Pero el laboratorio se instaló para la determinación de gluten y, además, la determinación de alérgenos está pendiente de resoluciones en torno a la metodología oficial para la detección, lo que terminará por ser dispuesto a nivel nacional”, explicó la bioquímica que tiene a su cargo el laboratorio en el que se desempeñan otros dos bioquímicos y personal de limpieza.

Otro campo de acción en el que el laboratorio seguramente ampliará sus funciones será el del control de alimentos, tal la atribución específica del Instituto de Bromatología.

“Estamos recién en un período de prueba. Hubo una etapa de poner a punto el equipamiento, de capacitar al personal, pero la idea es también trabajar en planes de vigilancia concreta, con la toma de muestras de alimentos que se venden como libres de gluten para constatar el cumplimiento de esta condición”, expuso Meier que informó que laboratorios como el entrerriano funcionan hoy en 13 provincias del país y manifestó la idea de que la infraestructura montada termine por ser sustentable a partir de la percepción de aranceles que pagan las empresas y productores al requerir el análisis.

El equipamiento más importante fue comprado por el gobierno nacional. La provincia dispuso del personal, acondicionó el lugar donde funciona y compró heladeras, aires acondicionados y otros elementos que hicieron a la estructura del lugar.

La semana pasada, se informó de la adquisición de una microcentrífuga que permite agilizar la detección del gluten. Junto al aparato se adquirió un nuevo kit de reactivos y otros insumos indispensables para atender la creciente demanda.

Entre las empresas que ya han podido realizar sus análisis de gluten con resultados satisfactorios se encuentran las siguientes: Cremigal SRL, SA La Sibila, Fenix SA, Lácteos Gotte SA, Lusil SA, se informó.

Desde el Instituto se destacó que además de las múltiples instancias de capacitación, asesoramiento y auditorías, se apuesta fuertemente a las determinaciones de laboratorio para este tipo de alimentos con la intención de allanar el camino de los productores, facilitando el acceso a estos análisis otrora inalcanzables.

Encuesta

Por estos días, el ICAB realiza una encuesta destinada a los consumidores, para conocer más sobre sus costumbres y actitudes, a los fines de aumentar el conocimiento con respecto a su comportamiento para poder priorizar y profundizar determinados aspectos en sus políticas informativas y de capacitación.

Esta herramienta comenzó a implementarse a través de la página web del Instituto a partir de esta semana. Se ingresa a través del sitio de gobierno http://www.entrerios.gov.ar/icab.

La encuesta se orienta en la convicción del Instituto que las responsabilidades en la inocuidad de los alimentos no se limitan al productor y al organismo de control, sino también el comerciante minorista y el propio consumidor.

En este marco, se apuesta a sumar actividades en pos de concientizar sobre las responsabilidades que le cabe a cada actor de la cadena de producción, comercialización y consumo de alimentos. Así como se desarrolla la campaña de frío, en donde se enfocan las acciones de control en comercios; o auditorías consensuadas en establecimientos productores, también preocupa conocer sobre las costumbres de los propios consumidores.

Para ello se ha diseñado esta encuesta dirigida al consumidor, donde se consulta en forma anónima sobre algunas cuestiones consideradas críticas al momento de definir responsabilidades en el eslabón final de la cadena.

Fuente: http://www.foodnewslatam.com/